Muchas son las personas que duermen, pero sienten que no descansan; o que con menos de 6 horas de sueño, “ya tienen suficiente“.
Cada vez se da menos importancia al sueño y al descanso, factor vital para rendir al 100% y para poder sentirse activo, sano, fuerte y con ganas de devorar la vida. Se tiene como “normal” el hecho de dormir poco, levantarse cansado, sentirse fatigado durante el día o no rendir suficiente. Pero eso no debe ser así, no se debe normalizar.
Dormir y descansar correctamente son necesidades básicas, igual que comer. Por tanto, hay que dedicarle su tiempo y darle la importancia que le corresponde.
¿Os suena la frase: “Voy con sueño todo el día, llega la noche y no pego ojo”?
Tranquilos, a mi también, y ¡pude poner remedio!
Existe un aminoácido esencial llamado triptófano que favorece el sueño reparador gracias al estímulo de la melatonina (neurotransmisor que regula los ritmos circadianos y el descanso nocturno) y de la serotonina, que regula el apetito y ayuda a equilibrar el consumo de hidratos de carbono; por lo que consumir alimentos ricos en triptófano ayuda en el seguimiento de la dieta.
Beneficios del triptófano:
- Contribuye a darle estructura a las proteínas.
- Regula el funcionamiento del sistema immunológico (defensas).
- Ayuda a prevenir problemas cardiovasculares y algunos tipos de cáncer.
Alimentos ricos en triptófano:
- Carne blanca (pavo/pollo).
- Pescado azul (salmón, atún).
- Yema de huevo.
- Lácteos, preferiblemente bajos en grasa.
- Plátano, piña, aguacate, ciruela, espinacas, remolacha, zanahoria, brécol, dátiles.
- Frutos secos (almendras, nueces, pistachos, anacardos). Además. son ricos en magnesio y omega 3.
- Chocolate negro (>70%)
- Cereales integrales, arroz y avena.
- Semillas (sésamo, lino, calabaza).
- Legumbres (garbanzos, lentejas, habas). Además aportan vitaminas del grupo B y magnesio.
- Levadura de cerveza.
- Alga espirulina.
Cabe destacar que la actividad y la efectividad del triptófano se ve favorecida si en la misma comida o en el mismo alimento hay hidratos de carbono, omega 3 o vitaminas del grupo B.
Además, la actividad física activa la producción de serotonina y estimula las endorfinas, conocidas también como “hormonas de la felicidad“. De esta manera aumentará vuestro bienestar, y ésto también ayuda a descansar mucho mejor.
Artículo escrito por Iris Salguero.
Técnico Superior en Dietética y Nutrición.
Especializada en Fisiopatología, Nutrición Deportiva y Fitness.
Especialista en Análisis Clínicos.